LLUEVE EN LUISIANA
Llueve. Semanas lloviendo sin tregua. Calado hasta los huesos y el alma. Muerto de frío, intento levantarme. ¡Dios, ni siquiera puedo moverme! Llueve. Veo árboles borrosos que se mueven; disparos y gritos flotan en el ambiente. El dolor vuelve y me vence. ¿Llueve? No, parece que ya no… Abro los ojos y veo el sol de mi España. ¡Madre…! Vuelvo a ser aquel niño que solo deseaba ser soldado. Llueve. ¿Es agua o es sangre? Despierto cuando el demonio indio tira de mi pelo. Lo último que siento es su hoja bajo mi piel.
1 Comentario
|
AutorJosé Manuel Ordás Miguélez Categorías |